- Quesitos en porciones
- Harina
- Huevos
- Pan rallado
- Hiervas aromáticas (la que queráis)
- Mermelada (mejor de frambuesa)
Si, a mi también me
sorprendió, pero lo tenía que probar y, oye, IMPRESIONANTE ¡¡
Empezamos por una recomendación, el pan rallado, parece una tontería, pero
desde que descubrí una versión que publicitan como "crujiente" no uso
otro. Supongo que habrá ya de diferentes marcas, pero el que por ahora he
encontrado es este:
Si, a mi
también me sorprendió, pero lo tenía que probar y, oye, IMPRESIONANTE ¡¡
Empezamos por una recomendación, el pan rallado, parece una tontería, pero
desde que descubrí una versión que publicitan como "crujiente" no uso
otro. Supongo que habrá ya de diferentes marcas, pero el que por ahora he
encontrado es este:
Bueno, pues teniendo
ya todos los ingredientes, la receta es de lo más sencillo: Vamos pasando los
quesitos por harina, huevo, y el pan rallado (al que le añadiremos las hiervas
aromáticas secas). Si no tenemos el pan que recomiendo y usamos el normal, para
que quede más crujiente, solo tenéis que repetir el empanado saltándote la
harina).
Una vez que tengamos los
quesitos empanado, los freímos en la freidora o en una sartén con
aceite, a fuego medio alto (no bajo para que el pan
no absorba demasiado aceite y no muy fuerte para que no se dore
muy rápido sin que se caliente el queso por dentro).
La
mermelada la podemos acompañar tal cual, pero puede que nos resulte demasiado
espesa para mojar los quesitos, así que recomiendo que paséis a un bol la cantidad
que vayáis a utilizar y le pongáis agua fría poco a poco a la vez que
la vamos batiendo para aligerarla un poco.
